19 mayo 2009

Beira y Nampula!

El viaje fue largo y tortuoso, pero no tanto como pensaba. Mis posaderas aguantaron el tiron, yo creo que se estaban acostumbrando. también me reconfortaba la idea de que cuando llegara abria alguien conocido esperandome, nada mas y nada menos que Eva!!!

Tras casi once horas llegue, y la ducha me sento de maravilla. Podia irme a dormir o intentar aprovechar un poco el dia ya que a la mañana siguiente viajaria para Nampula. Asi que me fui a pasear y a comer a un restaurante al lado de la playa. playa que nada tiene que ver con la de Pemba, aqui corria un aire fierte y el oleaje era agresivo, claro que es mar abierto no como nuestra bahia!

A la tarde noche y tras una larga charla en la que nos pusimos al dia y cotilleamos mucho, Eva me llevo a una especie de barraca de 1a clase donde habia musica en directo, no tan bueno como el de Maputo pero mejor que el de Pemba, ja ja. Alli cenamos y reimos con sus amigos y compañeros de trabajo. Acabamos en una discoteca, diria que en la discoteca, en la misma que la habiamos armado en mi anterior visita, pero esta vez el cansancio pudo mas que la voluntad y nos retiramos.



Al dia siguiente viaje para Nampula, de avion y vaya maravilla!!! Que rapidez y que comodidad. En Nampula me encontre con Antonio, un amigo mozambiqueño de Pemba pero que trabaja en Nampula. Estuvimos tomando unas cervecitas y poniendonos al dia. Se entero de mi marcha a España y la verdad es que fue un poco triste. En ese momento empece a darme cuenta de que me voy, auqnue todavia no lo tengo muy asimilado. A la noche queria salir con otros amigos pero el sueño se apodero de mi, el viaje empezaba a pasarme factura y todavia me quedaba el viaje de vuelta a Pemba!


A pesar de ser el ultimo transporte publico por carretera, se me hizo duro, quizas por eso mismo. Y pensandolo bien no tarde mucho en llegar pero estaba deseando llegar a mi casa y ponerme ropa limpia, 10 dias viajando por ahi no da para mantener una camiseta en condiciones.
A mi llegada me entere que los valencianos, Isa y Pau estaban haciendo paellada, asi que justo llegue y despues de ver que mi casa seguia en pie me largue a comer una riquisima paella acompañado de la gente que ya empeza a echar de menos. Con vistas a la maravillosa bahia de Pemba. Ya estaba en casa!
Mi viaje por fin habia acabado!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Holaaaaaa gracias por comentaro del pangolotines me entusiasma ese animalito! Un saludo!