15 marzo 2011

Militares

Como me gusta llevar un poco la contraria a la actualidad, quería retomar un tema que había dejado en stand-by (oh yea my english) cuando empezaron las revueltas en el Sur del Mediterráneo.
A cuento de lo que voy a comentar viene la viñeta del 12 de febrero de Erlich en El País (una eternidad en términos de actualidad, sólo hace un mes en el mundo real).

Cuando llegué a Montpellier y buscando siempre el debate, una de las mejores maneras de aprender de otros y ver desde otro punto de vista las inamovibles concepciones y convicciones que cada uno tiene, discutía a menudo con los turcos sobre su historia (de la que no sabía ni sé gran cosa), del funcionamiento del sistema de gobierno, etc y siempre me llamaba y me llama la atención el rol que juegan los militares. En Turquía, los militares son los salvaguardas de la Constitución, y por tanto de la separación Estado-Religión que ahora con Erdogan se ve debilitada.

En las revueltas de Túnez y de Egipto, los ajenos a esos países, vemos con asombro la confianza que la ciudadanía, demandante de libertad y de un sistema distinto al dictatorial existente, depositaba en el ejército. El cuerpo militar se presentaba como el que mejor podía defender las demandas del pueblo, la única institución en quien confiar para llevarlas acabo.

Con mentalidad española e incluso diría que europea, no deja de asombrarme ese papel que desempeña tanto en Turquía como en Túnez y Egipto el ejército. ¿En España os imagináis confiando el camino hacia la democracia, hacia la libertad, hacia la separación iglesia-estado a los militares?

Está claro que cada región, cultura tiene su propia historia y su propio proceso, lo que demuestra una vez más que nuestro modelo o proceso histórico es uno más, el válido para nosotros, pero no necesariamente para otros, y menos impuesto. A ver si nos entra en al cabeza!

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