Día de La Rioja y nosotros acampando en la cumbre del océano Indico, el pico más alto de todos los lares a este lado del mundo. Y como no podía ser menos, allí que me fui con mi bandera de La Rioja (bandera que tiene una carga sentimental más allá de la tierra que representa) a gritar a los cuatro vientos (que nos helaban) viva La Rioja. Y para que quede constancia ahí os dejo unas fotitos del momento (ya se que tengo unas pintas....). Y como no, la cena la acompañamos de un vinito de Rioja.
1 comentario:
venga que pronte te tenemos por aqui dando guerra!!! Gerardo me ha dicho que como no pases por el Rebuffi te mata!
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