Un amigo de Sevilla (gracias tito Julio) me mandaba el otro día estas fotos de la ciudad, ya que como habréis oído y visto en la tele había una huelga de basureros. Lo que a mi más me llamaba la atención y que los medios de comunicación en general no le daban más vueltas era la cantidad de toneladas que en una semana se acumulaba.
Los medios informaban de las toneladas acumuladas, y ponían el enfoque en la no recogida de esas basuras. Pero no oí a nadie llevarse las manos a la cabeza por la cantidad de desperdicios que generamos al cabo del día... toneladas y toneladas en una sola semana en la ciudad de Sevilla multiplicado por las miles y miles de Sevillas existentes en el mundo.... me da vértigo.
Parece que con el reciclaje el problema ya está resuelto, da igual que generemos desechos con tal de que los reciclemos. Es mejor reciclarlos y recuperar los materiales que se puedan que no hacerlo, eso está claro. Creo que la reflexión debería ir un paso más allá, volver a la re-utilización a un consumo mucho más responsable.
Nada de botellas de plástico, sino volver a la botella de cristal y a rellenarlas de leche, aceite u cualquier otro líquido que consumamos.
Nada de bolsas de plástico, volver a la cesta que tenía la abuela.
Nada de servilletas de papel, cubiertos de plástico o platos de cartón.
Nada de usar y tirar, lo roto se cose, lo estropeado se puede recuperar.
Y tantos otros nadas tan necesarios.
