En esta época de crisis, la morosidad se ha disparado a niveles bastante elevados y no porque la gente no quiera pagar, sino porque no puede hacerlo debido a su mala situación económica. Esta situación re-alimenta la penosa situación en la que la mayoría de los morosos se encuentran con embargo de casa y pocas posesiones materiales de las que dispongan.
Sin embargo hay otro tipo de morosos, más bien deberíamos llamarles defraudadores, que lo son de propia voluntad y que hacen todo lo posible para no pagar donde deberían y encima donde más falta hace. Empresas multinacionales que buscan siempre el beneficio económico más alto posible, se evaden de pagar impuestos donde más necesarios son, en los países en desarrollo. Según el vídeo que tenéis más arriba, estas empresas evaden cada año 130.000 millones en impuestos en los países que más necesario es ese dinero.
En la página de El Cobrador del Sur podemos encontrar, entre otra interesante información, por qué es importante pagar impuestos. Haber si nos entra de una vez en la cabeza que es necesario pagarlos y empezamos a rechazar socialmente a aquellos (individuos y empresas) que no lo hacen, ya que nos roban a todos.
Básicamente, el hecho de pagar impuestos genera los siguientes efectos positivos:
- Redistribución de la riqueza: los impuestos permiten que la riqueza generada en el país beneficie a toda la población, lo cual aumenta la cohesión social.
- Servicios públicos: el estado necesita los impuestos para financiar los sistemas de salud, educación, seguridad social e infraestructuras, que son básicos en cualquier país.
- Compensaciones: en ocasiones, los impuestos sirven para contrarrestar los efectos perniciosos que producen algunas actividades económicas.
- Representación: las personas que pagan impuestos se sienten más comprometidas y son más exigentes con los gobiernos que los recaudan, lo cual mejora la salud democrática.